Cumpleaños

 

El 3 de noviembre fue el día que escogí para venir al mundo.  Ya va haciendo un rato que estoy por estos lares, pero aún no me canso de la maravilla. Aunque no me gusta festejar cumpleaños, sí me alegra continuar viva, poder poner mis manos en nuevas obras, regalar alegría, abrazar.  Así que por esta y otras causas me tomaré toda una semana de vacaciones. La llegada de los 30 años, merece todo tipo de rituales y celebraciones. Prometo no pasar balance, ni llorar por lo que no hice hasta hoy. Ya no tiene remedio. Lo que sí puedo arreglar es lo que voy a hacer a partir del segundo siguiente.

No voy a hacer el recuento de las bondades de llegar a los 30 años con el que muchas mujeres con temor de vivir se engañan. Estar viva, tener salud, amigos, sueños por cumplir, personas a las que amar y ayudar, «entuertos que  desfacer» son motivos más que suficientes para seguir de empecinadas en este mundo loco en el que nos tocó nacer.

 

Pero lo primero que haré, nada más abrir los ojos este nuevo 3 de noviembre que tendré la suerte de vivir, será agradecerle otra vez  a mi madre por dejarme acompañarla todo este tiempo.  Ha sido y es una aventura insuperable.   Gracias a ella ustedes tienen la suerte de conocer a esta persona. Como ven los créditos son todos suyos.

5 comentarios en “Cumpleaños

  1. ah, tu cumple…casi se me pasa, de no ser por ese duende que tienes…Felicidades a tu mami, (yo siempre felicito a las madres en los cumpleañs, pues ellas son las que pasan el dolor y alegrías del parto, no???) Buen cumple!!! Y no te preocupes, que ya me desquitaré y te lo celebraré aunque sea fuera de fecha, 😉

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